12.6.07

De notas y tal

Hoy he recibido las notas de 3º de Inglés de la Escuela de Idiomas de Málaga. Me ha recordado a los viejos tiempos, cuando íbamos con nuestras mamás a recoger las notas del colegio, la profesora poniendo a parir mi sanísima manía de perderme en divagaciones en mitad de clase, yo escuchando con resignación cabizbaja mis aciertos y errores, etcétera. Qué recuerdos.

Pero hoy ha sido día de pequeñas pero importantes alegrías. Esperanza, motivación y trabajo más o menos bien hecho se esconden tras un aséptico "APTO" en un trozo de papel. Sé que es insufrible mostrar la alegría propia, pero déjenme recrearme conmigo mismo, que ya ven que estas cosas no me ocurren todos los días.

Hablando de días, quedan 7 días para Selectividad y las cucarachas empiezan a retozar en las calles a altas horas de la madrugada, síntoma inequívoco de que el veranito lo tenemos encima. Cerraré los ojos y me dejaré caer, a ver qué pasa.

11.6.07

Paul Mounsey

Así se llama mi último y fortuito hallazgo musical. Paul Mounsey es un compositor con una peculiar manera de entender el eclecticismo musical, llevándolo hasta nuevos horizontes hasta el momento inexplorados.

"City of walls" es el único álbum (completo) que he escuchado hasta ahora del músico escocés. En él los más diversos géneros étnicos hacen acto de presencia aderezados con unos contundentes pero a la vez elegantes golpes electrónicos, perfectamente fusionados con acordes orquestales, haciendo de temas como "Dunfermline", "City of walls" o "Work Song" pequeñas maravillas musicales.

Mención especial para dos temas que a mi juicio justifican por sí solos la adquisición de este disco. Son "A Child" y "Taking back the land". El primero es uno de esos cortos pero intensos momentos musicales que no dejarás de reproducirlo hasta gastarlo, una exótica voz y un fondo orquestal que inmediatamente te transportan a otro universo. El segundo parece un chiste en los primeros segundos: ¿Música celta mezclada con samba brasileira? Pues sí, y Monsey es capaz no sólo de hacerlo, sino, incluso de ponerte la carne de gallina, que es lo que tantos se devanan los sesos por provocar.

Escuchando el disco en conjunto no dejo de tener la sensación de que podría ser perfectamente una especie de recopilatorio de música de bandas sonoras. Y es que Mounsey fue durante un tiempo colaborador del maestro
Michael Nyman. En este disco pueden percibirse leves influencias de otros compositores como Yoko Kanno, Mike Oldfield o incluso Hans Zimmer, aunque tiene la suficiente personalidad como para que se tengan que tomar sólo como referencias.

Quizá el único defecto que podría achacar es que en ciertos momentos parece querer dejarse llevar por el dichoso afán de trascender, de conmover (ciertas melodías lo delatan), leit motiv chirriante de tantos músicos
modernos, aunque en esta ocasión Mounsey demuestra la suficiente madurez como para limitar ese afán a ciertas notas que consiguen no caer de lleno en el efectismo facilón y sí despertar infinidad de sentimientos de manera muy acertada.

Todo esto hace de "City of walls" un álbum notable y de Paul Mounsey un exponente destacado de la música étnica (¿o "tecno-étnica"?) actual. Compruébenlo.

9.6.07

Hogueras

Anoche en el garaje de mi bloque se incendió uno de los coches aparcados, a pocos metros de donde guardo el mío. Las llamas afectaron parcialmente a dos o tres vehículos adyacentes, o al menos eso pude comprobar esta mañana. Aún se desconoce el origen del incendio. Una colilla rebelde, una chispita, un acto vandálico... Nadie sabe. Fue una extraña noche de San Juan adelantada.


"Un arreglillo y listo."

Mientras tanto, el transcurrir de los días hace que cada vez estén más cerca los temidos exámenes de Selectividad, espero que esta vez me deparen más gloria que pena. Suerte a todos aquellos sufridores estudiantes que tienen que pasar por caja en junio para aprobar los exámenes universitarios, especialmente a ti, mi chiquitina. Ya sabe quién se debe dar por aludida. ¡A empollar!